Árbol de metas: de las metas de comprensión (II)

Esta entrada sigue a la anterior «Árbol de metas: de las metas de comprensión (I)«. Los siguientes párrafos introduce a la construcción de los Árboles de metas (o de métricas). Cada uno de sus elementos es expuesto con el fin de poder generar una analítica del aprendizaje de calidad.

Árbol de métricas

Un Árbol de métricas es una estructura jerárquica de distintos elementos que facilita la definición y ejecución del ciclo de la analítica del aprendizaje. El fin del mismo es reflexionar en relación a las métricas que darán soporte a los objetivos establecidos y las herramientas necesarias para conseguirlos.

Jerarquía del árbol de métricas

Tomando el ejemplo de la entrada anterior, se pueden leer algunas preguntas derivadas de la posibilidad de ayudar al alumno antes de realizar el examen:

• ¿Cómo ha sido el comportamiento en el proceso de aprendizaje del contenido de esta pregunta?
• ¿Ha demostrado algún problema de comprensión?
• ¿Formuló algún comentario al respecto en el foro de dudas?

Estas son algunas de las muchas preguntas que un profesor -o rol educativo- puede hacerse ante el objetivo de «Comprender conceptos». Así pues nos encontramos con una primera jerarquía macro dentro del árbol de métricas:

• Objetivo
• Hilo conductor
• Métricas de comprensión

El Objetivo es aquello que se quiere mejorar u optimizar. Se define con una afirmación de la cual colgarán el resto de elementos del árbol. El Objetivo puede ser genérico o concreto, pero lo que definirá la especificidad del árbol es el hilo conductor.

Hilo conductor y Metas de comprensión

Se define como hilo conductor una pregunta a modo de canalizadora del análisis del aprendizaje. Para el caso anterior el profesor debería definir como hilo conductor la siguiente pregunta: ¿Ha estudiado el alumno el concepto mal respondido?.

Por consiguiente, el hilo conductor del árbol de métricas define la pregunta que acompañará durante su construcción. Será la pregunta que nos deberemos hacer para asegurar que los subsiguientes elementos sean coherentes entre sí. El hilo conductor parte de uno de los objetivos definidos en el ciclo de la analítica del aprendizaje. Sin este las metas de comprensión carecen de sentido, pues parten del mismo.

Las metas de comprensión son preguntas formuladas de manera que la respuesta no sea numérica y que facilite la reflexión. Desgranan la pregunta conductora -hilo- en otras de más específicas y clarificadoras sin caer en la tentación de «numerizar» la respuesta.

Un ejemplo de métricas comprensivas mal formuladas, poco específicas y nada centradas en la resolución de la pregunta conductora sería:

Metas de comprensión mal formuladas	Posibles respuestas
¿Cuántas veces ha accedido al curso?	Numérica: 1, 2…
¿Cuántas veces ha visualizado el recurso educativo?	Numérica: 1, 2…
¿Cuántos minutos suma de visualización multimedia?	Numérica: 1, 2….

Hay que generar preguntas que inviten a la reflexión. Las preguntas de respuesta numérica no aportan significado adicional ni invitan a la reflexión. Unas posibles preguntas reflexivas y que dotan de significado a las respuestas numéricas podrían ser:

Metas de comprensión bien formuladas	Posibles respuestas
¿El alumno ha accedido al medio o recurso clave antes de realizar la actividad?	No. Sí, pero solo ha visualizado un 80% y con repeticiones intermedias. Sí, al 100% y sin repeticiones intermedias.
¿Ha realizado las actividades auto-evaluativas relacionadas con el concepto?	No, ninguna. Sí, todas. Sí, pero le falta una de las tres. Sí, pero todas con malos resultados. Sí, la última de ellas con buenos resultados.
¿Ha accedido a otros recursos de soporte durante la consulta del recurso educativo clave?	No. Sí, al vídeo complementario. Sí, a la lectura adicional.

Cada pregunta y respuesta aporta un significado específico, y tienen su relación directa con sus métrica/s y herramientas de recolección y análisis -aspectos micro del árbol de métricas-.